Esta mujer actúa con imprudencia al cruzar la calle por el medio de la cuadra, cuando debería hacerlo por las esquinas. Este hecho, posiblemente cometido por falta de conocimiento de las normas de tránsito o quizás mas probablemente por el tan buscado interés individual, tiene como consecuencia bloqueos y entorpecimiento del tránsito vehicular. Este tipo de actitudes se han tornado muy frecuntes en la vida en sociedad. En otras circunstancias podría haber desembocado en un accidente, lo que hubiese tenido consecuencias leves o trágicas, pero consecuencias al fin. ¿Es justo que un ciudadano que circula con normalidad por la vía pública pueda perder la vida por la imprudencia de algunos?. Las estadísticas revelan que Argentina es el país con mayor tasa de mortalidad por accidentes de tránsito. Vos, ¿querés ser un número mas?
Caminando por la calle 25 de Mayo, nos encontramos con un grupo de personas que nos bloqueaban el paso. Se trataba de una entrevista a un abogado, en las puertas de una de las oficinas del Juzgado Provincial. Los periodistas, en este caso, no tuvieron en cuenta el libre tránsito de las personas que por allí circulaban (como nosotros). Se empeñaron en concretar su objetivo, es decir, cumplir con la nota exigida por los medios, sin importar la seguridad de las personas que, al no poder circular, se veían obligadas a transitar por el asfalto. Esto ponía en riesgo su vida, por lo ya mencionado en la imagen anterior.
En conclusión, en sólo unos minutos pudimos observar muchas conductas del día a día que afectan a la sociedad entera. Quizas muy pocas veces nos damos cuenta de la dimensión de nuestros actos, que por comodidad, desinterés o (¿por qué no?) por diversión, cometemos a lo largo de nuesta vida.
Pero ya es hora de pensar en los demás. Pisar cabezas para lograr nuestros objetivos personales, jamás podrá permitir el progreso de la sociedad... Es hora de cambiar.
¡Excelente trabajo!
ResponderEliminarMuy buena reflexión sobre el tema, y bien argumentada.
NOTA: 10